El Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes entregó el Centro Cultural Biblioteca y Casa de la Memoria del Pueblo Kamëntsá-Inga en San Francisco, Putumayo. Un espacio que desde hoy será su centro de pensamiento y reuniones, además, lugar para resguardar su memoria y tradiciones ancestrales.
Sobre el particular, se destacó que la planeación de este espacio comenzó hace más de cinco años. Los Kamëntsá-Inga no solo aportaron en el diseño (visto desde el aire, su arquitectura tiene el símbolo de la fertilidad), sino que estuvieron presentes en toda la construcción.
De igual manera, se resaltó que se trata de un proceso que terminó con una ceremonia en la que participaron las autoridades de la comunidad, de Oscar Javier Escobar, el alcalde de San Francisco, y de Adriana Molano Arenas, viceministra del Patrimonio, las Memorias y la Gobernanza Cultural.
La entrega fue un evento lleno de rituales y ceremonias de las comunidades Inga y Kamëntsá, que viven en el Valle del Sibundoy, lugar al que consideran su territorio ancestral. Desde el recibimiento con limpia de ortiga, por parte de los niños ingas, la armonización por parte de los Tatsembëa, y el canto del himno nacional en lengua materna, del Grupo Jashnan, conformado por mujeres Kamëntsás
“Este es un espacio sagrado de nuestro resguardo. Ahora tenemos que corresponder como Katmënsás; darle vida”, dijo el Taita Walter Chindoy, gobernador del Pueblo Inga Kamëntsá de San Francisco, al recibir esta casa, que tiene sala del pensamiento, sala de informática y sala de lectura.
Por su parte, El Taita Luis Manuel Sigindioy, representante del comité de seguimiento de la obra por parte de la comunidad, recordó cómo fue todo el proceso para sacar adelante este proyecto, especialmente la forma en que ambas comunidades trabajaron de la mano y tomaron la responsabilidad de construir, con el apoyo del Ministerio de las Culturas, “algo grande que honrara el pensamiento de los dos pueblos”.
Entre tanto, la viceministra Molano destacó que “queremos pasar de ver todo lo que ustedes hacen desde la resistencia, a verlo desde una garantía de derechos. La resistencia va a estar siempre, pero ojalá en estas épocas gocen de los derechos que tienen y empiecen a aportar sabiduría, conocimiento y comprensión al resto del país y a la sociedad colombiana”.
La entrega terminó con el ritual del fuego Shinyak, con música del Grupo Jashnan y con un baile al rededor del fuego. Un abrebocas a lo que será el Betsknaté, el Gran Día para el pueblo Katmënsa, que se realizará en Sibundoy, Putumayo.
Una tradición milenaria que hace parte de la Lista Representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial del ámbito nacional, desde 2013, y que es apoyada por el Ministerio de las Culturas a través de la Lista Bienal de Proyectos de Interés Nacional y la Estrategia de Cultura de Paz.