
Ante el debate que iniciará la Corte Constitucional, para revisar la viabilidad del decreto madre del estado de conmoción Interior en la subregión del Catatumbo, los ministros del Interior, Armando Benedetti, y de Defensa, Pedro Sánchez, advirtieron las consecuencias que generaría tumbarlo y su impacto en seguridad de las comunidades que residen en esta zona del país.
“Hay que mirar y entender cuáles son las consecuencias que esto puede tener. Una de ellas es que, si se cae el decreto madre, también los otros 11 que quedaron y con los cuales se va a recoger recursos, por lo que la fuerza pública quedaría en tierra y detenida”, señaló Benedetti.
Por su parte, el ministro de Defensa aseguró que lo más preocupante es que se pueda poner en riesgo la vida de los habitantes del Catatumbo. Reiteró que “nosotros estamos para salvar vidas frente a este evento extraordinario, en el cual en un corto tiempo y en una zona tan pequeña ocurrió una alteración tan dramática y extraordinaria en términos de cantidades, de alteración del orden público y donde asesinaron a más de un centenar de personas, desplazaron a 64 mil y 23 mil están confinadas”.
Asimismo, el titular de la cartera política insistió en hacer un debate objetivo y en tener en cuenta el impacto de la decisión en el actuar del Estado, para atender la crisis humanitaria y de seguridad en este territorio.
“El llamado es a que se midan las consecuencias y que el debate no se haga con base en lo político. Lo hago con mucho respeto y con mucha admiración por la Corte, ya que los recursos para mantener el accionar de la fuerza militar y la fuerza pública, se caerían completamente”, puntualizó Benedetti.
Cabe destacar que actualmente el Gobierno nacional trabaja en un plan para atender la crisis humanitaria en El Catatumbo, que consta de cuatro fases: la primera es salvar vidas, la segunda es la afectación de la amenaza, la tercera es la estabilización y la cuarta, y última, es la sostenibilidad de las acciones en esta zona del país.
Al respecto, el ministro de Defensa, afirmó que “estamos en la segunda fase, que es afectando la amenaza. Hemos avanzado ya casi en un 60 % del control territorial, pero es una zona supremamente compleja, que exige unas capacidades importantes y que gracias a este decreto de conmoción interior se pueden fortalecer”.
En este sentido, el funcionario explicó las consecuencias puntuales de derrocar el decreto: Subrayó que “la primera de ellas tiene que ver con inteligencia; se afectaría enormemente esta capacidad y no podríamos ni proteger adecuadamente a la tropa ni mucho menos a la población. La segunda tiene que ver con la capacidad de protección frente a una amenaza que se ha acelerado y son los drones; en este presupuesto también está inmerso las capacidades de antidrón, por lo que se pondría en grave riesgo a la población y a nuestra fuerza pública. El otro elemento fundamental es la movilidad, ya que no tendríamos la capacidad para mover horas de vuelo”.
Finalmente, los jefes de la cartera del Interior y de Defensa, advirtieron que para proteger a los colombianos se requieren capacidades operativas y un presupuesto, por lo que tumbar el decreto madre del estado de conmoción interior, significaría coartar el accionar del Estado y la salvaguardia de la vida de los habitantes del Catatumbo.
Cese al fuego con alias ‘Calarcá’
De otro lado, al término de un consejo de Seguridad y Paz, el Ministro de Defensa afirmó que actualmente un comité del Gobierno Nacional está terminando de recolectar toda la información sobre los recientes hechos terroristas cometidos por las disidencias de alias ‘Calarcá’, y con base en ese informe, el miércoles se tomará una decisión sobre la continuidad o no del cese al fuego con ese grupo.
Recordó, además, que la orden para la Fuerza Pública es clara: mantener activa la inteligencia y contrainteligencia contra todas las amenazas, incluyendo las disidencias de ‘Calarcá’, aun en medio del cese de operaciones militares ofensivas.
“Si la Fuerza Pública en su maniobra llega a encontrarse con una amenaza por parte de hombres o mujeres armadas, independientemente del parche o de la caracterización que tengan, deben emplear absolutamente toda la capacidad y la fuerza legítima del Estado” advirtió el jefe de la Defensa.
El ministro Sánchez subrayó que no hay duda sobre la responsabilidad de esa estructura residual en las recientes acciones criminales contra miembros de la Fuerza Pública, y que será la comisión la encargada de determinar el modo, lugar y momento exactos de los hechos. “Para alcanzar la paz se requiere voluntad”, enfatizó, recordando que este grupo lleva 727 días en cese de operaciones, pero los recientes ataques evidencian una falta de compromiso
Sobre la crítica situación en esta zona del país, donde se registró el asesinato de más de un centenar de personas y el desplazamiento de cerca de 64.000 habitantes, el ministro explicó que se ha desplegado un plan de respuesta en cuatro fases: salvar vidas, afectar la amenaza, estabilizar y garantizar la sostenibilidad del área.
Además, destacó la importancia de fortalecer capacidades como la inteligencia, la defensa antidrones y la movilidad aérea y advirtió que, de no asegurarse el presupuesto, “prácticamente tendríamos que maniobrar de otra manera y podríamos quedar estáticos frente a la necesidad de poder proteger a los colombianos, porque para protegerlos se requieren capacidades”.