En su tercer día, y aunque las negociaciones son reservadas y nada está acordado, en su rol de presidenta de la COP16, Susana Muhamad entregó un balance e indicó que “si bien en el tema de movilización de recursos hay diferencias importantes entre las partes, se ha acordado ya una metodología para abordarlas, y a mí me parece eso positivo”.
De igual manera, Muhamad también dijo que “esperamos que, ojalá, el viernes podamos tener algunas de las grandes decisiones tomadas, pero eso no lo podemos anticipar. Esperemos cómo avanza hoy y mañana el trabajo”.
Asimismo, sostuvo que las negociaciones sobre las secuencias genéticas y la distribución de beneficios basados en datos digitales avanzan a buen ritmo con un ambiente de trabajo favorable. El plan de trabajo de los pueblos indígenas también ha mostrado un progreso notable en cuanto a consenso y colaboración.
Por último, Muhamad recordó que, en el segmento de alto nivel hacia el final de la negociación, el secretario de Naciones Unidas, los jefes de Estado y los ministros y ministras participarán, aportando a los resultados de la COP16.
Defensores ambientales, clave en la protección de la biodiversidad
Entre tanto, en el marco del Día de la Justicia Ambiental y los Defensores Ambientales en la COP16, la ministra Muhamad, reafirmó su compromiso con la protección de los derechos de los defensores ambientales, esenciales en el proceso de protección ambiental a nivel mundial.
Igualmente, subrayó la importancia de legitimar la defensa ambiental como un pilar fundamental de la democracia, especialmente en un país como Colombia que el año pasado enfrentó cifras elevadas de asesinatos a líderes ambientales.
Durante su intervención, Muhamad reiteró la importancia de eliminar la estigmatización de la lucha ambiental, frecuentemente percibida como un obstáculo para el desarrollo: Destacó que “debemos legitimar la lucha ambiental como una causa legítima y no como algo que aísle a los activistas de sus comunidades, lo que incrementa su vulnerabilidad”.
Además, la ministra hizo un llamado a la comunidad internacional para abordar este problema en conjunto. Se espera que durante esta COP se firme un memorando de entendimiento con miras a la COP30 de cambio climático, que se llevará a cabo en Brasil, cuyo objetivo será regular la exportación de oro y combatir el comercio ilegal de este metal, que ha generado graves consecuencias ambientales a nivel mundial.