La ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad, hizo un llamado al alcalde de Bogotá, Carlos Fernando galán, para trabajar conjuntamente en las decisiones de ordenamiento ambiental.
De esta manera, la titular de la cartera ambiental se pronunció frente a los señalamientos de intromisión hechos por el mandatario distrital, derivados de la demanda de nulidad interpuesta por el Ministerio de Ambiente a la licencia ambiental que otorgó la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca para la ampliación de la Avenida Boyacá.
“Aquí hay Estado Social de Derecho y por lo tanto lo estamos ejerciendo y no se debe interpretar en ningún momento por el alcalde Galán como una intromisión. Más bien, el alcalde Galán debería apoyarnos en el sentido de que trabajemos conjuntamente en, realmente, las decisiones de ordenamiento territorial en clave de la protección”, afirmó la ministra Susana Muhamad.
Además, Muhamad recalcó que “el Ministerio de Ambiente es la cabeza del Sistema Nacional Ambiental, como cualquier institución pública y, sobre todo, en el tema ambiental, tiene el deber de estar permanentemente vigilante de que se cumpla la normatividad ambiental”.
Igualmente, la titular de la cartera de Ambiente sostuvo que “consideramos que en este caso no se cumplió sobre una reserva regional fundamental para la estabilidad climática de la sabana de Bogotá y consideramos que esa avenida, como está planteada, va a generar graves perjuicios para toda la sabana de Bogotá”.
En tal sentido, la ministra explicó que se interpuso dicha demanda al considerar que no se respetaron los determinantes ambientales ni se realizó un diagnóstico de alternativas para no afectar la Reserva Thomas van der Hammen.
“Se fue directamente al proceso de licenciamiento, se sustrajo la reserva y se aprobó, y nosotros creemos que eso viola el régimen ambiental y por eso demandamos. Ahora la demanda fue admitida, hemos pedido en esa demanda una medida cautelar y estamos esperando si el Consejo de Estado nos otorga esa medida cautelar”, subrayó.
Finalmente, Muhamad destacó que a la Alcaldía y a la CAR, junto con el Ministerio de Transporte, se les presentaron diferentes alternativas y, sin embargo, continúan con un proyecto que afecta la última reserva que conecta los cerros orientales con el río Bogotá, es fundamental para la estabilidad climática de la sabana de Bogotá. Es un determinante ambiental del Plan de Ordenamiento Territorial (POT) de superior jerarquía.