La administración distrital anunció el retiro del artículo sobre el cobro del impuesto de alumbrado público del Plan Distrital de Desarrollo, ya que tomó la decisión de priorizar el desarrollo de la ALO Norte, un proyecto de infraestructura fundamental para la movilidad de Bogotá que se ha debido construir hace varios años.
“Sabíamos, sin embargo, que esto tendría un alto costo y así lo asumimos. Garantizar la ALO Norte implicaba perder algunos votos claves para aprobar el cobro por el alumbrado público. Por eso, pensando en que la ALO Norte sea una realidad, tomamos la decisión de pedirle a la bancada del Nuevo Liberalismo que eliminara el artículo del Plan Distrital de Desarrollo relativo al cobro por alumbrado público”, sostuvo la autoridad distrital.
Al respecto, señaló que “esto, evidentemente, tiene consecuencias importantes respecto a los recursos que necesitamos para llevar a cabo los proyectos estratégicos que Bogotá exige, particularmente en seguridad. Este cobro, que ya se ha implementado en 27 de las 32 capitales del país y en municipios como Sopó, Mosquera y Chía, hubiera representado un recaudo de 1 billón de pesos”.
Según explicó, esos recursos son fundamentales para garantizar una mayor autonomía financiera de la ciudad y así depender menos de los recursos de la Nación, y para mejorar, ampliar y modernizar el alumbrado público de la ciudad. Hoy en día, 30% de las luminarias de Bogotá siguen sin tener tecnología LED y modernizarlas es una tarea urgente.
“Seguiremos insistiendo y en los próximos meses presentaremos un proyecto de acuerdo que permita abordar nuevamente la discusión sobre el alumbrado público, así como un proyecto para revisar el esquema tributario con el objetivo de avanzar en la generación de empleo y la reactivación económica, tal como nos comprometimos ante el Concejo”, aseguró la administración distrital.
Finalmente, desde la Alcaldía mayor se destacó “a quienes, en el Concejo, en los gremios y en las calles entendieron que los grandes proyectos de ciudad requieren más ingresos y que las transformaciones de una sociedad implican decisiones difíciles. La ciudad puede confiar en que estamos poniendo la casa en orden y saldando deudas históricas. La ALO Norte es una realidad”.