A partir de hoy, y cada semana, en ANP Noticias visitaremos uno de los cerca de mil museos que hay en Colombia. Este maravilloso viaje hacia el pasado lo iniciamos en el Museo Nacional de Colombia, ubicado en el Centro Internacional de Bogotá, fundado en 1823 y considerado el más antiguo del país y uno de los primeros de América.
Actualmente, cuenta con 14 salas de exposición permanente, en las que los visitantes pueden apreciar más de 25 mil piezas, que representan la historia y el patrimonio del país. Se espera que para 2023, al conmemorar los 200 años de vida, ya estén abiertas al público 17 salas.
“El Museo se crea en 1823 por una instrucción que le da Simón Bolívar a Santander, en uno de sus viajes a Europa. Le dice que se reúna allá con unas personas para montar un instituto que se dedique a contar la historia y también a reunir algo del patrimonio, a reunir colecciones de ciencias naturales en el país. Empieza con unas colecciones que eran principalmente de ciencias naturales, pero había un interés muy importante por el tema de la historia y por eso algunos documentos históricos entran a formar parte también de esa colección. Luego ingresarían las piezas de arte que estaban necesariamente asociadas con la historia”, explica Juliana Restrepo Tirado, directora del Museo Nacional.
La sede que acoge al Museo Nacional de Colombia, conocida como el Panóptico, fue construida entre finales de 1870 y principios del S. XX, diseñada originalmente como Penitenciaría Central. Más tarde, hacia 1948, fue designada como destino final del Museo.
“Se iba a inaugurar el Museo Nacional aquí, aprovechando la Novena Conferencia Panamericana, el 9 de abril del 48, pero no se pudo por obvias razones y se inauguró unos meses después, en mayo. Aquí tenemos dos historias: la Historia del Museo y el Museo en la Historia, que está en el primer piso, y la historia del edificio, que también tiene su propia historia, marcada por haber sido una cárcel, ser un lugar central en la guerra de los mil días, abrirse como penitenciaria y después pasar a ser museo. El edificio podríamos decir que es la pieza principal del museo”, señala Rodrigo Trujillo, Curador de Arte del Museo Nacional.
El Museo Nacional es reconocido como un lugar multidisciplinar, que favorece el diálogo con sus visitantes a través de las colecciones de arqueología, arte, historia y etnografía. En sus salas, ofrece un calendario anual de exhibiciones temporales y una variada programación académica y musical, con más de 200 conciertos anuales. La implementación de exposiciones con recorridos virtuales y visitas guiadas, a través de videoconferencias y streaming, han permitido al Museo conectarse con los colombianos de todas las regiones y con otros ciudadanos del mundo.
“Nosotros decimos que el Museo Nacional, es el museo de todos los colombianos, porque aquí se encuentra un patrimonio, conformado por cuatro colecciones: una colección de arte, una de arqueología, una de historia y una de etnografía. A través de esas cuatro colecciones se cuenta la historia del país, se cuenta la historia de lo que somos culturalmente, de lo que fuimos, de lo que somos y de lo que seremos. La idea es que los colombianos en su visita al museo puedan identificarse, puedan encontrarse en esas historias y puedan encontrar algo de su propia historia en alguna de las piezas, en alguna de las salas y, por lo tanto, su visita se convierta en una visita inolvidable”, indica la señora Restrepo Tirado.
Hoy el Museo Nacional cuanta con la Curaduría de Arte, que tiene a su cargo las pinturas, esculturas, dibujos, grabados fotografías y videos de la colección del museo; la Curaduría de Historia, a cargo de las colecciones testimoniales de la historia política, económica, social y científica de Colombia; La Curaduría de Arqueología, responsable de las colecciones de vestigios arqueológicos, desde las primeras evidencias de antiguos grupos de cazadores y recolectores que habitaron el actual territorio colombiano en el 12.000 antes del presente, hasta el inicio de la era colonial en el siglo XVI; y la Curaduría de Etnografía, a cargo de las colecciones de objetos contemporáneos relacionados con los pueblos indígenas y afrodescendientes de Colombia, ocupándose en los últimos años también de los objetos de las colecciones de arte africano, de las comunidades campesinas, del pueblo ROM, de los colectivos LGBTI y de otras minorías. Las colecciones de etnografía son salvaguardadas e investigadas por del Instituto Colombiano de Antropología e Historia (ICANH) y por el Museo Nacional de Colombia.
“Lo que estamos haciendo en el Museo es poniendo en diálogo esas cuatro colecciones alrededor de temas diferentes. Algunos temas se refieren a momentos históricos, pero también está la economía, también está la construcción de la sociedad, estamos hablando del mundo pre hispánico. Cada una de las salas tiene una especificación de alguna manera en el relato y no todas están conectadas con el relato histórico. Aquí en el Museo estamos hablando desde 14.000 años, cuando estamos en la sala del segundo piso, en la sala de “SER TERRITORIO”, hay una pieza de 12.000 años o 14.000, porque tenemos nosotros también nuestro pasado pre hispánico, estamos hablando de toda la arqueología. Hay toda una curaduría de arqueología, que nos está hablando de los colombianos antes de la llegada de los españoles”, explica el Curador de Arte.
Recientemente, el Museo Nacional de Colombia dio apertura a una nueva sala, que “ significa darle continuidad a un proyecto que comenzó en el 2010 y al cual le hemos dado continuidad diferentes equipos de trabajo, diferentes direcciones, conscientes de la necesidad de renovar esa historia de país, una historia que pueda ser más incluyente y en la cual todos los colombiano puedan participar. Quedan faltando otras tres salas y la idea es darle apertura a la última en el año 2023, cuando el museo cumple 200 años”, comenta la señora Restrepo Tirado.
Conscientes de la crisis que vive Colombia y el mundo por cuenta de la pandemia del Covid – 19, el Museo Nacional ha tomado todas las medidas de prevención, con el fin de facilitar de manera segura su visita. “Nosotros hemos venido en una apertura paulatina, para que los visitantes se sientan seguros, sientan que no solo el Museo Nacional sino todos los museos del país, somos espacios seguros. Una apertura que primero nos llevó a tener un aforo muy limitado, con un distanciamiento de dos metros, ahorita estamos con distanciamiento de un metro. Hacemos control de aforo, sobre todo los fines de semana, que el Museo recibe muchos visitantes, la gente puede ver que hay fila en la entrada del museo, porque esperamos a liberar espacio para que puedan entrar los nuevos visitantes”, manifiesta su directora.