
En el marco de un encuentro internacional financiado por la Unión Europea y convocado por el Programa de Cooperación entre América Latina, el Caribe y la Unión Europea en materia de política de drogas, COPOLAD III, el Ministerio de Justicia y del Derecho de Colombia presentó los resultados de dos laboratorios de innovación social implementados en Cali (Valle del Cauca) y Santander de Quilichao (Cauca), como parte de la Política Nacional de Drogas 2023–2033 ‘Sembrando vida, desterramos el narcotráfico’.
La delegación colombiana estuvo encabezada por director de Política de Drogas y Actividades Relacionadas del Ministerio de Justicia y del Derecho, Alexander Rivera Álvarez, quien expuso sobre el desarrollo de los dos laboratorios.
Además, explicó su vinculación con los ejes 3 (Atención a población en condición de vulnerabilidad frente a mercados urbanos de drogas), 4 (Consumo de sustancias psicoactivas desde el cuidado integral, la salud pública y los derechos humanos) y 7 (Cambio de narrativas) de dicha política, orientados a la innovación pública, el abordaje integral del consumo y la transformación de narrativas, respectivamente.
Durante la presentación se detallaron las etapas del proceso, que incluyó el mapeo de actores locales, interpretación colectiva, deliberación comunitaria y cocreación de prototipos de intervención. Estas acciones están dirigidas principalmente a jóvenes en situación de vulnerabilidad en contextos urbanos y semiurbanos.
Según Rivera, los laboratorios han desarrollado un instrumento de política pública coconstruido con comunidades para medir cambios de narrativas asociados al consumo de sustancias psicoactivas. Este instrumento fue presentado como parte de los resultados de la implementación del enfoque de innovación social de la Política Nacional de Drogas.
En el evento participaron representantes de Uruguay, Perú, Chile y del programa COPOLAD III. Junto con estos países, Colombia lidera un mecanismo técnico orientado a medir transformaciones en la percepción del consumo de sustancias psicoactivas, desde narrativas juveniles.
Los laboratorios cuentan con acompañamiento técnico del Agirre Lehendakaria Center y del Global Initiative Against Transnational Organized Crime (GI-TOC), y han sido financiados por COPOLAD III.
Desde diciembre de 2024, estos laboratorios se integraron a las Zonas de Paz y Esperanza (ZPE), una estrategia del Ministerio de Justicia para el desarrollo alternativo urbano en municipios afectados por economías ilícitas como Buenaventura (Valle del Cauca), Tumaco (Nariño) y Quibdó (Chocó). En estos territorios se han realizado acciones de formación, cultura de legalidad y generación de ingresos.
Además, el Minjusticia, durante el evento internacional desarrollado en Chile, informó que se encuentra en proceso de cooperación con la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) y otros organismos internacionales para ampliar su alcance técnico y territorial.