El Ministerio de Justicia y del Derecho invirtió en Tumaco $1.700 millones en el Banco de Proyectos que ayuda a personas con iniciativas sostenibles, enfocadas en la producción de cacao como alternativa legal y rentable.
El Banco de Proyectos, programa gestionado por la dirección de Drogas que cuenta con el apoyo técnico de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, UNODC, ha beneficiado en Tumaco, Nariño, a más de 205 personas, 89 de ellas mujeres.
Al respecto, el director de Política de Drogas y Actividades Relacionadas del Ministerio de Justicia, Alexander Rivera, dijo que la transformación de los territorios no solo se logra con proyectos productivos, sino con una estrategia integral que incluya acceso a recursos, formación y seguridad. Indicó que “seguiremos trabajando por el desarrollo integral de las comunidades y su sostenibilidad a largo plazo”.
Los avances y resultados fueron presentados por los representantes de tres asociaciones y corporaciones: Hombres de mi Tierra, del Consejo Comunitario Bajo Mira y Frontera, que representa a la población víctima del conflicto armado; la Asociación de Productores para el Desarrollo Agropecuario Social y Comunitario (Asprodea), del Consejo Comunitario Unión del río Chagüi; y la Corporación para el Desarrollo de Versalles (Corpoversalles).
Por su parte, Edson Estupiñán, de la organización Hombres de mi tierra, dijo que el Banco de Proyectos los ayudó a desarrollar un modelo de negocio sostenible, basado en el cacao para reemplazar cultivos de uso ilícito en el Consejo Comunitario Bajo Mira y Frontera.
Además, indicó que, “nuestro proyecto se logró implementar con 65 beneficiarios de acá de Tumaco, de la zona de Bajo Mira y Frontera, que son productores de cacao que vienen trabajando hace muchos años en esta economía. Estas son personas, que de una u otra manera, han venido haciendo un tránsito de economías ilegales a lícitas”.
Igualmente, agrega que “afortunadamente el cacao en este momento tiene una buena acogida por los precios que hay en el mercado. Con el proyecto de Hombres de mi Tierra, nos aprobaron un presupuesto para desarrollarlo y obtuvimos unos incentivos, herramientas, acompañamiento e insumos agropecuarios, lo que nos ayuda a fortalecer la iniciativa y a disminuir los costos de producción”.
Este modelo, con enfoque agroecológico, permitió la participación de pequeños productores, la generación de empleo local y el fortalecimiento de la estructura socioempresarial de los productores.
Entre tanto, Olegario Preciado, de Asprodea, manifestó que los productores recibieron capacitación en buenas prácticas agrícolas, acceso a asistencia técnica especializada y fortalecimiento organizativo.
Y Héctor Hurtado, de Corpoversalles, destacó el fortalecimiento técnico y comercial de pequeños productores, promoviendo la producción bajo estándares de calidad y sostenibilidad lo que les permitirá en el corto plazo aumentar la rentabilidad y acceder a mercados formales.
En el marco de este encuentro se llevaron a cabo otros dos eventos para impulsar el desarrollo territorial con enfoque de género e inclusión.
Zonas de Paz y Esperanza (ZPE), donde se conversó sobre el impacto que ha tenido este programa desde su inicio en diciembre de 2024. En pocos meses, ya cuenta con 24 líderes y lideresas formados, a través de la metodología Pre-Textos y siete réplicas comunitarias autónomas, que han beneficiado a más de 100 niños, niñas, jóvenes y adolescentes.
Este programa busca fortalecer el tejido social en comunidades afectadas por el conflicto armado mediante la prevención de la violencia y el reclutamiento forzado, la promoción de la convivencia pacífica y el liderazgo comunitario, así como la inclusión social y económica de mujeres y jóvenes.
Para 2025, se espera ampliar las ZPE con un enfoque de impulso a la economía popular y de promoción de alternativas sostenibles para el desarrollo local.
El otro evento clave fue el relacionado con género y desarrollo, en el que se destacó el papel fundamental de las mujeres en la transformación de Tumaco.
Se enfatizó en la importancia de continuar trabajando en el empoderamiento de mujeres productoras de cacao, garantizando su acceso a oportunidades económicas y fortaleciendo su liderazgo en la comunidad.
También se discutió la necesidad de crear más espacios de formación en derechos, emprendimiento y equidad de género, consolidando una agenda que permita su participación en la construcción de paz y el desarrollo territorial.
Los eventos reunieron a representantes del Gobierno nacional, regional y local; la sociedad civil, organizaciones comunitarias, comunidades, gremios y aliados internacionales. Durante el encuentro, se evaluaron los avances del Banco de Proyectos y se discutieron estrategias para garantizar su sostenibilidad a largo plazo, reafirmando el compromiso de seguir impulsando iniciativas que fortalezcan el desarrollo y la inclusión en Tumaco.
“En el marco de la Política Nacional de Drogas 2023 -2033 ‘Sembrando vida, desterramos el narcotráfico’, la Dirección de Política de Drogas y Actividades Relacionadas no cesa en su objetivo de aportar a la transformación territorial, entendiendo que, solo así se logra mitigar las vulnerabilidades territoriales, las cuales se han identificado como determinantes de las economías ilícitas”, enfatiza la cartera de Justicia.