La COP16 dio inicio oficial al Segmento de Alto Nivel con la participación de jefes de Estado, ministros y líderes mundiales, lo que marcará el rumbo de las negociaciones sobre biodiversidad en los próximos días.
En esta oportunidad, Cali, sede de la conferencia, se convirtió en el epicentro de un llamado mundial a una acción concreta para enfrentar el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la degradación de la tierra y la contaminación.
El evento contó con la presencia del presidente de Colombia, Gustavo Petro; el secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres; el ministro de Relaciones Exteriores de Colombia, Luis Gilberto Murillo; y la ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia y presidenta de la COP16, Susana Muhamad.
De igual manera, entre los líderes internacionales también estuvieron presentes el presidente de Armenia, Vahagn Khachaturyan; el presidente de Ecuador, Daniel Noboa; el presidente de Guinea Bissau, Úmaro Sissoco Embaló; y el presidente del Consejo Presidencial de Transición de la República de Haití, Leslie Voltaire.
Igualmente, el presidente de Surinam, Chan Satokhi; el vicepresidente de Bolivia, David Choquehuanca; la ministra de Relaciones Exteriores de El Salvador, Alexandra Hill Tinoco; y el ministro del Poder Popular para Relaciones Exteriores de Venezuela, Yvan Gil.
“La COP16 de Cali, la COP30 de Belén de Pará deben ser definitivos puntos de inflexión donde no sigamos haciendo lo mismo. ¿Quién cree que, para solucionar un problema del tamaño de la crisis climática, que es la contaminación de toda la atmósfera planetaria por las fábricas de la codicia, se va a solucionar con los mismos métodos de siempre?”, afirmó el presidente Petro durante su intervención de apertura.
Además, el jefe de Estado colombiano también subrayó la esencia del evento en Cali como una cumbre del pueblo y un símbolo del cambio que demanda el planeta. Sostuvo que “aquí nos rodea la alegría y el calor humano. Quisimos que fuera así. Quisimos que el pueblo se tomara la COP porque los pueblos del mundo se tienen que tomar las decisiones para una revolución mundial que es lo que necesitamos en realidad”.
Por su parte, el secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, dio un contundente discurso en el que describió la crisis ambiental global como una “guerra contra la naturaleza” y enfatizó en la necesidad urgente de restaurar la armonía con nuestro planeta.
De igual manera, instó a los países a presentar planes claros de alineación con los objetivos de conservación global y fomentar la movilización de recursos financieros, no solo de fuentes públicas, sino también del sector privado. Concluyó que “la biodiversidad es nuestra aliada; debemos pasar de sacrificarla a preservarla”.
Cabe resaltar que, con esta reunión, los líderes esperan sentar las bases para un futuro sostenible, fortaleciendo los compromisos de adaptación, mitigación y financiamiento, pilares fundamentales para abordar los desafíos ambientales que enfrenta el mundo.
Al cierre del encuentro, la presidenta de la COP16, Susana Muhamad, señaló que estos son los primeros jefes de Estado que vienen a una convención de biodiversidad. Enfatizó en que “esto no es menor, porque esto no es un tema ya de conservacionistas ni de ecologistas ni ambientalistas, es un tema que debe ir al centro de la política pública de los gobiernos y del mundo, y su presencia eleva el nivel de discusión política que la COP de biodiversidad tiene, y era uno de los objetivos también de ser anfitriones de este evento”.
Así mismo, Muhamad agregó que la biodiversidad y la recuperación de la vida, de la mano de los pueblos, es un objetivo político tan importante y simultáneo al de la descarbonización y la transición energética, a pesar de que esto no tenga rentabilidad inmediata, porque no se trata de rentabilidad sino de la seguridad humana en el siglo XXI.