El ministro de Educación, Daniel Rojas Medellín, fue el único funcionario gubernamental que asistió a la Asamblea General Multiestamentaria convocada por el movimiento estudiantil, muestra de compromiso con la crisis de la Universidad de Antioquia,
En esta oportunidad, el rector, Jhon Jairo Arboleda, también hizo presencia, pero las sillas destinadas a la Alcaldía de Medellín y la Gobernación de Antioquia quedaron vacías, lo que generó una indignación entre los cerca de 1.500 estudiantes que hicieron presencia en el Teatro Popular Camilo Torres y demás actores conectados por plataforma digital.
Cabe destacar que la Asamblea, organizada por el movimiento estudiantil, buscaba que las autoridades locales y nacionales respondieran a la grave situación financiera que enfrenta la Universidad. Sin embargo, solo el ministro y el rector estuvieron a la altura del compromiso, mientras que otros actores clave decidieron no participar.
“El presupuesto de la Universidad de Antioquia ha crecido con recursos del Gobierno Nacional, sin embargo, sigue con la misma cantidad destinada por la Gobernación de Antioquia desde el 2022. Así como les preocupan las vías 4G, también debería preocuparles el futuro de la universidad”, señaló el ministro, quien reiteró que la educación no es un servicio, es un derecho.
De igual manera, el funcionario sostuvo que “en Mineducación encuentran siempre un aliado para avanzar en la lucha que se propone desde las universidades públicas. Desde el Gobierno Nacional hemos fortalecido la base presupuestal de la Universidad de Antioquia con dinero real, no con promesas vacías. Mantenemos nuestro compromiso de no recortar las horas cátedra ni trasladar la crisis financiera a trabajadores, maestros, estudiantes o a la calidad educativa”.
Además, el ministro resaltó la importancia de garantizar derechos para los estudiantes y la comunidad universitaria en general e indicó que “los dos representantes del Gobierno Nacional en el Consejo Superior Universitario tienen instrucciones claras de votar en favor de los derechos de las minorías y la permanencia de mujeres y diversidades sexuales dentro de la universidad. Cualquier desvío de esta línea será considerado una traición a la clase trabajadora”.
El ministro Rojas recordó que esta no es la primera vez que se sienta a dialogar con los estudiantes. El pasado 6 de septiembre se reunió con ellos para escuchar sus preocupaciones y trabajar en propuestas para salvar la universidad.
“Este es un esfuerzo continuo que estamos liderando desde el Gobierno Nacional, pero no podemos hacerlo solos. Necesitamos que la Alcaldía y la Gobernación también asuman su responsabilidad”, declaró el ministro.
Vale la pena resaltar que, en la reunión del 1 de octubre, Rojas convocó también a la bancada antioqueña del Congreso, así como a representantes de la Gobernación y la Alcaldía de Medellín, con el objetivo de buscar soluciones concretas.
“Los congresistas presentaron una propuesta que incluye revisar el cálculo actuarial para reducir tasas de interés o moratorias en pensiones, lo que aminoraría los cargos de caja de la Universidad. También proponen ajustar el manual de obras por impuestos, modificar el Decreto 1279 del 2002 para reducir cargas presupuestales, y solicitar a la Alcaldía de Medellín reducir prediales y tarifas diferenciales en servicios públicos, como las que tiene la Universidad Nacional en Bogotá, para beneficiar a la Universidad de Antioquia”, resumió el ministro.
Entre tanto, los estudiantes expresaron su preocupación por la falta de soluciones reales frente a la crisis financiera de la institución, y señalaron la ausencia del gobernador y del alcalde en la discusión, a pesar de que el 50 % de los estudiantes provienen de Medellín sin recibir apoyo financiero del gobierno local. Los estudiantes también denunciaron el retiro de contratos públicos por parte de la Gobernación y la mala gestión de los recursos universitarios.
“Nos preocupa profundamente la falta de asistencia de actores fundamentales como el distrito de Medellín y la Gobernación de Antioquia. Más allá de las estigmatizaciones que circulan en los grandes medios, es vital que se asuman soluciones reales para la crisis de la Universidad de Antioquia. Parece que desde estas entidades solo responden con afirmaciones vacías, pero ni siquiera asisten a los espacios a los que los convocamos. La educación no es un servicio, es un derecho, y lo seguiremos defendiendo gobierne quien gobierne”, dijo Esteban Cuadros, estudiante de la Universidad de Antioquia.
“A pesar de las dificultades, el Ministerio sigue cumpliendo su palabra y liderando el plan de salvamento de la Universidad de Antioquia, en beneficio de la juventud antioqueña y el futuro de la educación superior”, enfatizó el ministro Daniel Rojas.