La Unidad para las Víctimas realizó una histórica entrega de indemnizaciones administrativas en el Urabá Antioqueño: fueron en total 531 cartas, con recursos que ascienden los 9.000 millones de pesos, las que se entregaron a víctimas del conflicto armado de los municipios de Apartadó y Turbo, poniendo fin a la larga espera de quienes habían sido beneficiados con esta medida de reparación.
En esta oportunidad, el acto fue liderado por la directora de la Unidad para las Víctimas, Patricia Tobón Yagarí, y estuvo marcado por diferentes expresiones artísticas y simbólicas. Una de ellas, fue la danza presentada por el colectivo ‘Creciente Folclórica de Mutatá’ y la entrega de cientos de girasoles en representación de la fuerza y la capacidad de transformación que han tenido las víctimas del conflicto armado para cambiar sus vidas, familias, territorios y comunidades.
Al inicio de su intervención, la directora de la entidad señaló que “reconocemos que las víctimas han esperado mucho tiempo por esta indemnización. A pesar de saber que con esta medida no se reparan todos los daños causados por el conflicto armado, sí contribuirá a sus proyectos de vida y al fortalecimiento de sus emprendimientos”.
Así mismo, la funcionaria afirmó que “seguimos trabajando decididamente por mejorar en su atención y reparación integral, porque en este gobierno estamos convencidos de que, a mayor reconocimiento de los derechos de las víctimas del conflicto armado, mayores avances tendremos como país”.
Según la directora, la Unidad para las Víctimas seguirá avanzando en la entrega de indemnizaciones en el Urabá Antioqueño en lo que queda de septiembre, para llegar a un total de 1.452 víctimas.
“Se priorizará a los adultos mayores, personas con enfermedades huérfanas, ruinosas y con discapacidad. Se hará con recursos que superan los 23 mil millones de pesos en diferentes municipios de esta subregión”, indicó la directora de la Unidad para las Víctimas.
De igual manera, la funcionaria destacó que “si este país no avanza de la mano de las víctimas, no se podrá avanzar hacia la construcción de la paz. Las víctimas son las únicas que le pueden decir a un país sumido en el conflicto armado el por qué es necesario avanzar en la construcción de paz. Esto que les pasó a ustedes no puede seguir ocurriendo y por eso queremos seguir trabajando para que a las víctimas se les reconozca en su dignidad, y que su dolor no sea utilizado para el odio”, dijo Tobón Yagarí.
Y concluyó: “Tenemos que dignificar sus voces y darles participación. Ese es nuestro compromiso, así como indemnizar a muchas víctimas que como ustedes han esperado esta medida por mucho tiempo. Me alegra que desde la Unidad para las Víctimas podamos contribuir a sus proyectos de vida. Y quiero que sepan que estamos comprometidos en que las instituciones de gobierno están para cumplirle a la comunidad”.
¿Cómo fue este proceso de indemnización?
La entrega de estos recursos se hizo mediante el cumplimiento de requisitos establecidos en la ley, en un gran porcentaje correspondientes a la ruta general y también de la ruta de priorización, en resarcimiento por los daños causados por el conflicto armado en Turbo y Apartadó.
Los recursos entregados en este acto ascienden a más de 9.249 millones de pesos, los cuales hacen parte de las 1.452 cartas de indemnización que se estarán entregando durante el mes de septiembre, con un total superior a los 23.143 millones de pesos en los diferentes municipios de la subregión.
“Lo que se busca con estos actos es la dignificación de las víctimas del conflicto armado colombiano, reconocer sus historias, sus luchas, su fortaleza, su resiliencia y su poder transformador en esta tierra de Urabá, conocida por su belleza natural y su rica biodiversidad, pero que también ha sido testigo de dolorosas páginas de la historia, con episodios de violencia y masacres que dejó huellas imborrables en las 366.968 víctimas que están incluidas Registro Único de Víctimas (RUV) y que pueden acceder a atención”, expresó la directora de la Unidad de Víctimas.
Una vez culminaron los actos simbólicos, inició el espacio pedagógico y de orientación en la inversión adecuada de los recursos. Posteriormente se presentó la oferta institucional por parte de entidades del Sistema Nacional de Atención a Víctimas (SNARVI).
En esta oportunidad, participaron Prosperidad Social con el programa Familias en Acción, la Secretaría de Inclusión Social, el Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena), el Banco Agrario, Colpensiones, entre otras entidades. Además, también lo hicieron cooperantes internacionales.