La delegación del gobierno Petro y la delegación de las disidencias de las antiguas FARC, conocidas como Estado Mayor Central, EMC, anunciaron un acuerdo para instalar la mesa de diálogos y negociaciones de paz.
Desde la población de Suárez, en el departamento de Cauca, luego de tres días de reunión, a través de un documento con 11 puntos, las partes indicaron que anunciarán la fecha, lugar, mecanismo de funcionamiento, invitados especiales, países y actores internacionales, que en calidad de garantes y/o acompañantes, apoyen esa mesa de negociación.
De igual manera, ratificaron a la Misión de Verificación de la ONU, a la Misión de Apoyo al Proceso de Paz (MAPP-OEA), a la Conferencia Episcopal y al Consejo Mundial de Iglesias como acompañantes permanentes.
La idea, según el acuerdo preliminar, es que el funcionamiento de la mesa de diálogos se inicie junto con la entrada en vigencia de los decretos de respeto a la población civil y del cese al fuego bilateral, temporal, de carácter territorial y nacional.
En tal sentido, las partes indicaron que continuarán ajustando esos protocolos, la implementación del Mecanismo de Veeduría, Monitoreo y de Verificación y la elaboración de una agenda para la mesa de diálogos de paz, que serán aprobados al momento de la instalación.
Así mismo, el gobierno y las disidencias de las Farc acordaron establecer ocho misiones humanitarias en Antioquia, Arauca, Cauca, Huila, Nariño, Norte de Santander, Putumayo y Sur de Bolívar con el objetivo de formular recomendaciones de aplicación del Derecho Internacional Humanitario y escuchar a la ciudadanía e instituciones.
Dentro de lo acordado entre las partes, se afirma que el próximo 17 de septiembre se celebrará una reunión para evaluar, hacer seguimiento y ajustar los compromisos adquiridos de generación de confianzas y anunciar la fecha de la instalación de la mesa de diálogos de paz.
Esta era la primera vez que ambas delegaciones se encontraban para avanzar en los puntos que aún faltan por concretar de cara a esa mesa de diálogo, que pretende una negociada con esta disidencia de FARC, comandada por Iván Mordisco. De ese grupo, que tiene presencia en 16 departamentos del país, hacen parte guerrilleros que no firmaron el Acuerdo de Paz de 2016.
Otro de los acuerdos entre las partes, es la creación de una Comisión Accidental con carácter especial para “la resolución de contingencias, conformado por delegados del gobierno, la delegación de diálogos del EMC, representante del Secretario General de la ONU, la MAPP-OEA, la Conferencia Episcopal colombiana y el Consejo Mundial de Iglesias.
Este acuerdo especial fue el resultado de una reunión de tres días que tuvieron ambas delegaciones, en la vereda Playa Rica del municipio de Suárez (Cauca). Según el comunicado de las partes, la Asociación de Trabajadores Campesinos de La Cordilla (Asocordillera) garantizaron el espacio de tres días de reunión en el territorio.
En el documento, igualmente, se consignó que mientras llega la instalación de la mesa, la Fuerza Pública continuará con sus funciones operativas establecidas en la política de Paz Total.
El espacio contó con la participación de Gilles Bertrand, embajador de la Unión Europea; Dag Nagoda, ministro consejero de la embajada de Noruega; monseñor Omar Sánchez, de la Conferencia Episcopal de Colombia, el Consejo Mundial de Iglesias, la Misión de Verificación de la ONU, la MAPP-OEA e invitados internacionales.